Bienvenidos

Hola, somos Wilson y Carmen, un matrimonio que hace más de 26 años iniciamos la mayor de las empresas: convivir.

Con tres hijos y un hermoso nieto, podemos decir sin lugar a dudas que nuestro balance al dia de hoy es muy positivo, Dios nos ha bendecido de mil maneras, y a las puertas del medio siglo de vida, estamos en la mejor etapa de nuestra existencia. Por ello creamos este Blog, para compartir con quien las quiera recibir, las bendiciones que Dios nos ha dado a través de Su palabra, y los tips que nos llegan para tener una vida más saludable y placentera.

Y de eso se trata Vivir Mejor, de compartir. Queremos compartir contigo las cosas que nos han llevado a mejorar nuestra calidad de vida, que se habia deteriorado a causa del stress y las preocupaciones. Tenemos la esperanza de que algo de lo que encuentres aquí, pueda ser de bendición para tu vida, para tu salud y para la de los que amas.

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martes, 19 de julio de 2011

Principios del Surfista

Impresionante, increíble, maravilloso es lo que diríamos de los jóvenes
que cabalgan sobre la cresta de las olas pareciendo dominar el mismo océano.


Pero, no es casualidad, ni simple deporte.
Hay 7 principios que cada surfista cumple a cabalidad para poder sostenerse en la ola
y son los mismos principios que debieran gobernar nuestra vida si queremos cabalgar
sobre las olas desafiantes de nuestra vida cotidiana.

He aquí los principios del surfista:

1.Pasión por la ola y en la ola.

"El surfista no habla de las olas, sino que espera y se monta en la ola.
"Pasión por la ola lo impulsa a la ola".

Necesitamos estar más apasionados por la vida.


2.- Ir más allá de los límites.

"Combinar capacidad y preparación con resolución y el atrevimiento
nos lleva contínuamente a ensayar nuevos movimientos e ir en busca de olas
más grandes y recorridos más largos.
El surfista sabe que no existen dos olas iguales,
tantea cada ola y cabalga en cada una de manera diferente .
La vida a veces nos exige ir más alla de donde hemos llegado.

3.Espere revolcones.

"Hay que estar dispuesto a comer arena antes del almuerzo.
"Los grandes ejecutores le dan la bienvenida a lo inesperado y sacan lecciones de los revolcones.
NO te preocupes si algún día la vida te da revolcones, aprendamos de ello y sigamos adelante.

4. No le dé la espalda al océano

"El surfista respeta el poder y aprecia la grandeza del océano,
por ello jamás lo ignora ni le da la espalda".
Jamás le demos la espalda a los desafíos de la vida.
Hay muchas posibilidades y oportunidades.
Ninguna se pierde, otro toma las que yo no tomo.


5. Mire siempre hacia "afuera".

"Afuera" se refiere a las olas que aparecen en el horizonte.
Saben poner atención a la ola que está cerca y a la vez observar la próxima.
Muchos pierden su vida mirando hacia dentro sin levantar la vista.
Hay un horizonte aún más amplio por conquistar.

6. Muévase antes de que la ola lo mueva.
"Una ola grande, como sucede con los cambios,
se mueve con tanta rapidez que si uno espera demasiado tiempo
ella pasará sobre uno y lo dejará luchando contra la corriente.
Percepción y discernimiento me indican cuando y cómo moverme.

7. Jamás practique solo.

En una sociedad compleja nadie hace frente a la vida por sí solo.
Los surfistas tienen una regla determinante:
¡Jamás practique surf solo!
Por seguridad, por intercambio de conocimiento y por tener con quién placticar mientras aparece la ola.
NO vivas mas solitario aunque seas solo. Una cosa es estar solo y otra es sentirse solitario.
Proverbios 22:19
Para que tu confianza sea en el Señor, Te las he hecho saber hoy á ti también.

Marcos 10:49
Entonces Jesús parándose, mandó llamarle: y llaman al ciego, diciéndole: Ten confianza: levántate, te llama.


Hebreos 10:35
No perdáis pues vuestra confianza, que tiene grande remuneración de galardón

jueves, 14 de julio de 2011

Cuando Me Amé de Verdad!



 Cuando me amé de verdad,
comprendí que en cualquier circunstancia, yo estaba en el lugar correcto,
 en la hora correcta, y en el momento  exacto.
Y, entonces, pude relajarme.
Hoy sé que eso tiene nombre...   Autoestima.

Cuando me amé de verdad,

 pude percibir que mi angústia y mi sufrimiento emocional,
no es sino una señal de que voy contra mis propias verdades.
Hoy sé que eso es... Autenticidad.

Cuando me amé de verdad,
dejé de desear que mi vida fuera diferente y comencé a ver
que todo lo que acontece, contribuye a mi crecimiento. 

 Hoy sé que eso se llama... Madurez.

Cuando me amé de verdad,
comencé a percibir como es ofensivo tratar de forzar alguna situación,
o persona, solo para realizar aquello que deseo,
aún sabiendo que no es el momento o la persona no está preparada...
inclusive yo mismo.

Hoy sé que el nombre de eso és... Respeto.

Cuando me amé de verdad,
comencé a librarme de todo lo que no fuese saludable...

 Personas, situaciones, todo y cualquier cosa que me empujara hacia abajo.
De início, mi razón llamó esa actitud egoísmo.
 Hoy sé que se llama... Amor Propio.

Cuando me amé de verdad,
dejé de temer tener tiempo libre y desistí de hacer grandes planes,
abandoné los mega-proyectos del futuro.

Hoy hago lo que encuentro correcto, lo que me gusta,
cuando quiero y a mi propio ritmo.
Hoy sé, que eso es... Simplicidad.

Cuando me amé de verdad,
desistí de querer tener siempre la razón y,
con eso, erré mucho menos veces.

 Hoy sé que eso se llama...  Humildad.

Cuando me amé de verdad,
desisti de quedar reviviendo el pasado y de preocuparme con el futuro.

 Ahora, me mantengo en el presente, que es donde la vida acontece.
Hoy vivo un día a la vez. Eso se llama...  Plenitud.

Cuando me amé de verdad,
percibí que mi mente puede atormentarme y decepcionarme.

Pero cuando yo la coloco al servicio de mí corazón,
ella tiene un gran y valioso aliado.
Todo eso es...Saber Vivir!

No debemos tener miedo de confrontarnos...
Hasta los planetas chocan... y del caos nacen las estrellas.


Charles Chaplín.


Cuando uno ama de verdad descubre que no espero nada para mi...sino que me proyecto fuera de mí y eso es amar de verdad.


Tú siempre le das la victoria al rey que pusiste sobre Israel. Tú siempre les muestras tu amor a David y a sus herederos. Salmo 18:50

El rey confía en tu amor, y tú, Dios altísimo, no lo dejarás fracasar. Salmo 21:7

lunes, 11 de julio de 2011

Regalos Que No Cuestan Nada

  OCHO REGALOS QUE NO CUESTAN NADA

 1.- El regalo de Escuchar:.

Pero realmente escuchar, sin interrumpir, bostezar, o criticar. Solo escuchar.

2.- El regalo del Cariño.

Ser generoso con besos, abrazos, palmadas en la espalda y apretones de manos, estas pequeñas acciones demuestran el cariño por tu familia y amigos.

3.- El regalo de la sonrisa.

Llena tu vida de imágenes con sonrisas, dibujos y caricaturas, y tu regalo dirá "me gusta reír contigo".

4.- El regalo de una nota escrita.

Esto puede ser un simple "gracias por ayudarme", un detalle como estos puede ser recordado de por vida.

5.- El regalo del reconocimiento.

Un simple pero sincero "te ves genial de rojo", "has hecho un gran trabajo" o "fue una estupenda comida" puede hacer especial un día.

6.- El regalo del favor.

Todo los días procura hacer un favor.

7.- El regalo de la soledad.

Hay días que no hay nada mejor que estar solo.
Sé sensible a aquellos días y da este regalo a ti mismo o pídelo a los demás.

8.- El regalo de la disposición a la gratitud.

La forma mas fácil de hacer sentir bien a la gente es decirle cosas que no son difíciles de decir como: !!"Hola"!! y !!"Muchas Gracias"!!.

El justo hace ventaja a su prójimo:
Mas el camino de los impíos les hace errar. Lucas 10:27

viernes, 8 de julio de 2011

Lo que decis, recibís


Tus PALABRAS, tus SUEÑOS, y tus PENSAMIENTOS tienen el poder de crear condiciones en tu vida.

De lo que hables, lo obtendrás.

Si seguís diciendo que no soportás tu trabajo, podés perderlo.

Si seguís diciendo que no soportás tu cuerpo, tu cuerpo puede enfermarse.

Si sigues diciendo que no aguantas tu coche, tu coche puede ser robado o descomponerse.

Si seguís diciendo que estás quebrado, sabes qué? Siempre estarás quebrado.

Si seguís diciendo que no podés confiar en hombres o mujeres, siempre encontrarás alguien en tu vida que te lastimará o te traicionará.

Si seguís diciendo que no encontras trabajo, seguirás desempleado.

Si seguís diciendo que no podés encontrar alguien a quien amar o que crea en vos, tus pensamientos atraerán mas experiencias confirmando tus creencias.

Hacé tus pensamientos y tus conversaciones más positivos y guárdalas con fe, esperanza, amor y acción.

*No tengas miedo de creer que podés tener lo que vos querés y merecés.*

Observá tus 'Pensamientos,'
Se convertirán en palabras.

Observá tus 'Palabras',
Se convertirán en acciones.
 
Observá tus 'Acciones',
Se convertirán en hábitos.

Observá tus 'Hábitos',
Se convertirán en carácter.

Observá tu 'Carácter',
Se convertirá en tu 'Destino'

Manantial de vida es la boca del justo. Prov. 10:11a

jueves, 7 de julio de 2011

CUIDADO CON TUS DESEOS


Lectura: Éxodo 20:1-17.

"No codiciarás…" Éxodo 20:17

A veces me pregunto por qué Dios no enumeró los Diez Mandamientos en el orden inverso,
ya que el décimo se relaciona con el primer pecado: el deseo.

El pecado de Eva no fue simplemente desear una fruta, sino querer tener el conocimiento
que Satanás le dijo que la haría semejante a Dios (Génesis 3:5).
Su codicia la llevó a violar el primero y el décimo mandamiento que Dios posteriormente le dio a Moisés.

Si no codiciamos, eliminamos muchas de las razones por las cuales desobedecemos los otros mandamientos.
Querer tener lo que no es nuestro nos induce a mentir, robar, cometer adulterio, matar y negarnos a honrar a nuestros padres.
Rehusamos descansar porque, con seis días de trabajo, no podemos conseguir lo que deseamos.
Usamos mal el nombre de Dios cuando lo empleamos para justificar algo que queremos hacer.
 Idolatramos las riquezas y las relaciones interpersonales porque no queremos colocar toda nuestra confianza en el Señor.

Me resulta difícil pensar en pecados que no incluyan alguna forma de codicia.
Sin embargo, como es el último de la lista, tendemos a pensar que es el más insignificante.

Pero no es así.

Si detenemos el pecado cuando todavía está en nuestro corazón y en nuestra mente,
evitamos convertir a los demás en víctimas de nuestro actuar pecaminoso y sorteamos muchas de sus graves consecuencias.

Reflexión:
 Contentamiento es comprender que Dios me ha dado todo lo que necesito.

miércoles, 6 de julio de 2011

La voz de Dios y nuestra decisión


Si hay mil pasos entre nosotros y Dios, Él los dará todos, menos uno.
A nosotros nos corresponderá dar el paso final. La decisión es nuestra.

Un buen piloto hace cualquier cosa con tal de llevar a sus pasajeros salvos a casa.

Fui testigo de un buen ejemplo de esto una vez que volaba por algún lugar sobre Missouri. La auxiliar de vuelo nos dijo que volviéramos a nuestros asientos porque nos aproximábamos a una zona de turbulencias. Se trataba de un vuelo problemático y la gente tardó bastante en reaccionar; pero ella nos advirtió de nuevo: «Vamos a movernos, así que por seguridad, es mejor que se sienten».
Muchos lo hicieron. Pero unos pocos no, así es que ella cambió el tono: «Damas y caballeros, por su bien, ¡vuelvan a sus asientos!»
 
Creía que todos estaban sentados, pero era evidente que estaba equivocado, porque la próxima voz que oí fue la del piloto: «Este es el capitán Brown», anunció. «Hay algunos pasajeros heridos por ir al baño en lugar de permanecer en sus asientos. Queremos ser bien claros en cuanto a nuestra responsabilidad. Mi trabajo es pasar con ustedes a través de la tormenta. Su trabajo es hacer lo que les digo. ¡Así es que tomen asiento y abróchense los cinturones!»

En ese momento se abrió la puerta del baño y apareció un tipo con el rostro rojo de vergüenza y con una sonrisita tímida se fue a sentar.
¿Se equivocó el piloto en lo que hizo? ¿Fue demasiado insensible o poco cortés? No, todo lo contrario. Para él era más importante que el hombre estuviera a salvo aunque avergonzado, que no advertido y herido.
 
Los buenos pilotos hacen lo que sea necesario con tal de llevar a sus pasajeros a casa.

Así es Dios.

He aquí una pregunta clave: ¿Cuánto quieres que Dios haga para prestarte atención?
Si Él tuviera que escoger entre tu seguridad eterna y tu bienestar terrenal, ¿qué crees que escogería?

No te apresures en contestar. Piensa un poco.

Si Dios te ve de pie cuando deberías estar sentado, si Dios te ve en peligro en lugar de verte a salvo, ¿cuánto quieres que Dios haga para que te preste atención?
¿Qué dirías si Él decidiera llevarte a otro país? (Como hizo con Abraham.) ¿Qué dirías si te llamara a dejar el retiro? (¿Recuerda a Moisés?) ¿Qué tal si te hablara un ángel o las entrañas de un pez? (Tipo Gedeón o Jonás.) ¿Qué tal un ascenso como Daniel o una destitución como Sansón?

Dios hace cualquier cosa con tal que le escuchemos. ¿No es ese el mensaje de la Biblia? La búsqueda implacable de Dios. Dios a la caza. Dios buscando. Hurgando debajo de la cama en busca de sus hijos escondidos, moviendo los arbustos rastreando la oveja perdida. Haciendo una bocina con sus manos para gritar por las quebradas. Luchando con los nuevos Jacobs en los enlodados Jabocs de la vida.

Por todas sus peculiaridades y desigualdades, la Biblia tiene una historia sencilla. Dios hizo al hombre. El hombre rechazó a Dios. Dios no se dará por vencido hasta que traiga al hombre de vuelta a Él. Desde Moisés en Moab hasta Juan en Patmos, ha podido oírse la voz: «Yo soy el piloto. Tú eres el pasajero. Mi trabajo es llevarte a casa. Tu trabajo es hacer lo que yo digo».
 
Dios es tan creativo como inexorable. La misma mano que mandó maná a Israel, envió a Uza a la muerte. La misma mano que dejó libre a su pueblo de la esclavitud en Egipto, lo envió cautivo a Babilonia. Bondad y austeridad. Ternura y dureza. Firmeza fiel. Paciencia urgente. Ansiedad tolerante. Suave en su gritar. Dulce. Atronador. Trueno apacible.

Así es como Juan vio a Jesús. El Evangelio de Juan tiene dos temas: la voz de Dios y la decisión del hombre. Y ya que este libro se basa en Juan, verás el mismo dúo: su voz, nuestra decisión.
Jesús dijo: «Yo soy el pan que da vida. Yo soy la luz del mundo. Yo soy la resurrección y la vida. Yo soy la luz del mundo. Yo soy la puerta. Yo soy el camino la verdad y la vida. Vendré otra vez para llevaros conmigo».
 
La proclamación de Jesús: siempre ofreciendo, nunca forzando:
De pie junto al paralítico: «¿Quieres recobrar la salud?» ( Juan 5:6 ).
Cara a cara con el ciego, ahora sano: «¿Tú crees en el Hijo del hombre?» ( Juan 9:35 ).
Cerca de la tumba de Lázaro, probando el corazón de Marta: «Y ninguno de los que viven y creen en mí morirá jamás. ¿Crees esto?» ( Juan 11:26 ).
Probando la intención de Pilato: «¿Eso lo preguntas tú por tu propia cuenta, o te lo han dicho otros de mí?» ( Juan 18:34 ).
La primera vez que Juan oyó a Jesús hablar, este preguntó: «¿Qué estáis buscando?» ( Juan 1:38 ). Entre las últimas palabras de Dios, está todavía esta otra: «¿Me quieres?» ( 21:17 ).
Este es el Jesús que Juan recuerda.
Las preguntas sinceras. Las afirmaciones atronadoras.
El toque suave.
Nunca yendo donde no le invitan, pero una vez invitado, nunca se detiene sino hasta finalizar, hasta que se haya hecho una decisión.

Dios susurrará. Gritará. Tocará y forcejará. Nos despojará de nuestras cargas; y aun nos quitará nuestras bendiciones. Si hay mil pasos entre nosotros y Dios, Él los dará todos, menos uno. A nosotros nos corresponderá dar el paso final. La decisión es nuestra.

Por favor, entiende. Su meta no es hacerte feliz. Su meta es hacerte suyo. Su meta no es darte lo que quieres; es darte lo que necesitas. Y si eso significa una o dos sacudidas para que vuelvas a tu asiento, lo hará. La molestia terrenal es un agradable cambio para la paz celestial.

Jesús dijo: «En el mundo habréis de sufrir; pero tened valor, pues yo he vencido al mundo» ( Juan 16:33 ).

¿Cómo podía hablar con tal autoridad? ¿Con qué derecho toma el mando? Simple. Él, como el piloto, sabe lo que no sabemos, y puede ver lo que no podemos.

¿Qué sabía el piloto?     Sabía cómo volar un avión.
¿Qué veía el piloto?       Turbulencias adelante.
¿Qué sabe Dios?            Sabe cómo gobernar la historia.
¿Qué ve Él?                    Supongo que usted entiende el mensaje.
Dios quiere llevarte a casa con seguridad.

Sólo piensa en Él como tu piloto. Piensa en ti como su pasajero. Considera tu Biblia como una lectura en vuelo. Y piensa dos veces antes de levantarte e ir al baño.

martes, 5 de julio de 2011

RETIRARSE PARA AVANZAR


Lectura: Mateo 14:13-23.

"Despedida la multitud, subió al monte a orar aparte; y cuando llegó la noche, estaba allí solo" Mateo 14:23
 

Un amigo mío me contó sobre un retiro de líderes de su iglesia.
Durante dos días, ese grupo se reunió en un lugar retirado para dedicar tiempo a la oración,
la planificación y la adoración. Mi amigo no sólo se sintió renovado, sino que cobró fuerzas.
Me dijo: «Sin duda, este retiro nos ayudará a avanzar en el ministerio de la iglesia».

Me sonó extraño lo que dijo: retirarse para avanzar.

Pero es así.
A veces uno tiene que detenerse y reacomodarse
antes de poder progresar de manera significativa.
 Esto es particularmente cierto en nuestra relación con Dios.

Jesús mismo acostumbraba «retirarse para avanzar».

Después de un intenso día de servicio en la región del mar de Galilea,
se retiró, apartado de los demás.
Mateo 14:23 nos dice que «despedida la multitud, subió al monte a orar aparte;
y cuando llegó la noche, estaba allí solo».
Solo en presencia del Padre.

En este mundo vertiginoso y competitivo, es fácil caer en el agotamiento al esforzarse para avanzar a toda costa.


 Pero, aun en nuestro deseo de ser creyentes eficientes,
debemos estar habitualmente dispuestos a retirarnos
para entrar en la presencia de Dios.
Sólo al renovar las fuerzas en Él, podemos hallar los recursos
 necesarios para avanzar en Su obra.

Haz un retiro con Jesús antes de seguir adelante.


Reflexión:
 A solas con el Padre es el único lugar donde hallaremos fuerzas para seguir adelante.