Bienvenidos

Hola, somos Wilson y Carmen, un matrimonio que hace más de 26 años iniciamos la mayor de las empresas: convivir.

Con tres hijos y un hermoso nieto, podemos decir sin lugar a dudas que nuestro balance al dia de hoy es muy positivo, Dios nos ha bendecido de mil maneras, y a las puertas del medio siglo de vida, estamos en la mejor etapa de nuestra existencia. Por ello creamos este Blog, para compartir con quien las quiera recibir, las bendiciones que Dios nos ha dado a través de Su palabra, y los tips que nos llegan para tener una vida más saludable y placentera.

Y de eso se trata Vivir Mejor, de compartir. Queremos compartir contigo las cosas que nos han llevado a mejorar nuestra calidad de vida, que se habia deteriorado a causa del stress y las preocupaciones. Tenemos la esperanza de que algo de lo que encuentres aquí, pueda ser de bendición para tu vida, para tu salud y para la de los que amas.

Síguenos, quizas encuentres algo que te sirva a ti tambien... y escribenos a wilsondusser@hotmail.com te responderemos con gusto.

viernes, 16 de diciembre de 2011

Solo una cosa es necesaria

"Muchas cosas ocupan nuestra vida, pero solo una cosa es la más necesaria".
“Mientras iba de camino con sus discípulos, Jesús entró en una aldea, y una mujer llamada Marta lo recibió en su casa.
Tenía ella una hermana llamada María que, sentada a los pies del Señor, escuchaba lo que él decía. Marta, por su parte, se sentía abrumada porque tenía mucho que hacer. Así que se acercó a él y le dijo:
 — Señor, ¿no te importa que mi hermana me haya dejado sirviendo sola? ¡Dile que me ayude!  —Marta, Marta —le contestó Jesús—, estás inquieta y preocupada por muchas cosas, pero sólo una es necesaria. María ha escogido la mejor, y nadie se la quitará”. Luc.10:38 al 41.

En la vida muchas veces nos encontramos como Marta, preocupados, inquietos y abrumados con nuestras responsabilidades y quehaceres, pero vivir de esta manera nos priva del privilegio más grande que podamos tener, que es estar en compañía con Jesús.
En la historia vemos que Jesús le dice a Marta que estaba preocupada por muchas cosas, pero ninguna de esas “muchas cosas” eran tan necesarias, lo mejor era estar sentado a los pies del Señor escuchando sus palabras y compartiendo con Él. El centro de este mensaje son las palabras del Maestro cuando dice:
“Pero solo una cosa es necesaria”.

Esto es lo que hoy Dios te esta diciendo:
“Solo una cosa es la más necesaria en tu vida”
y es estar en contacto y compañerismo con Jesús.

Muchas de esas cosas que nos preocupan no son en verdad tan importantes como creemos, más bien colaboran para que vivamos más estresados y ansiosos. Por eso todo debemos edificarlo en la confianza y la fe puesta en Dios.
Descansando en su protección y ayuda.

Tomemos todo los días un momento para tener una amistad y un contacto con el Señor, sentándonos a sus pies para escuchar sus palabras, dejando de lado todos los afanes y ansiedades. El Señor quiere ser nuestro amigo íntimo, y tiene el control de todo en nuestras vidas, solo necesita que estemos más con Él.
Éxito en la vida no es llenarse de actividades y trabajos, o acumular dinero a expensas de nuestra salud física y emocional.

Éxito es vivir bajo la bendición de Dios en todo momento, es estar en paz, es ser libre emocionalmente y poder trabajar alegres y eficazmente.

Imaginemos a dos personas trabajando, haciendo lo mismo, donde aparentemente todo es igual, pero internamente una esta preocupada y angustiada; mientras que la otra en su interior se encuentra relajada, en paz y alegre en la presencia de Dios. Esta es la gran diferencia, pues no se trata de hacer algo o no hacer nada. Sino de escoger lo más necesario que es vivir  nuestra vida sentados a los pies de Jesús.


Él quitará las cargas y las angustias para que podamos vivir más livianos.

Vivir a los pies de Jesús es tener un estado interior de paz y confianza permanentes mientras hacemos cualquier cosa en la vida.
 



Recuerda lo que dijo Jesús en Mateo 11:28
“Vengan a mí todos ustedes que están cansados y agobiados,
y yo les daré descanso”

jueves, 15 de diciembre de 2011

Ser feliz es una decisión

Sin duda alguna, todos tenemos la oportunidad  de ser felices,
es como un derecho que ejercemos en el momento que nosotros queremos,
pero a veces por cosas que vivimos, olvidamos que lo tenemos y pensamos equivocadamente que lo hemos perdido o peor aún, que no lo merecemos.


Hace poco escuche a una persona decir “yo he sido malo,
yo no merezco ser feliz, ni que me pasen cosas buenas”,
como asumiendo su infelicidad, también hay quienes piensan
que es el karma y que cuando dejen de estar tristes
o dejen de pasarles tantas cosas se habrán librado de él,
como aceptando todo lo que les pasa como un castigo,
lo cierto es que no hay nada que pueda impedir la felicidad
de una persona, porque el ser feliz es una decisión,
hay personas que en estos momentos se encuentran enfermas
o pasando alguna dificultad y sin embargo, siempre están sonriendo y felices,
y al preguntar el motivo de su felicidad la respuesta es tan simple como
“porque así he decidido estar”, asumen tanto su felicidad que ni siquiera
el tener tantos problemas les puede borrar la sonrisa.


Y es que una persona feliz no es aquella que no tiene problemas
y lleva una vida perfecta, sino que ha tomado la decisión de serlo
a pesar de todo lo que pase a su alrededor, porque no se puede poner
la felicidad propia en manos de los demás, si lo hacemos
llegará un momento en el que nos fallen o nos hagan falta
y entonces nos quedaremos sin nada.


La felicidad es como un regalo que Dios pone en tus manos,
pero depende únicamente de ti abrirlo y disfrutarlo,
sin importar en que situación te encuentras, no importa si has cometido errores,
no importa lo que hayas hecho en tu pasado, ni cuantos problemas tienes,
los obstáculos y dificultades no se vencen con una actitud triste y derrotada.


Tal vez puedes decir: “La vida que me tocó no ha sido fácil”,
pero es que nadie ha tenido una y mucho menos perfecta,
es la actitud con la que se enfrentan a ella,
las ganas con las que salen adelante y la decisión que toman
de ser felices la que los lleva a estar por encima de cualquier mal que les rodea.


En la Biblia hay muchos versículos que hablan de felicidad, gozo y alegría,
pero este es perfecto para repetir diariamente, digno de adoptar como estilo de vida:


Este es el día que ha hecho Jehová; nos gozaremos y alegraremos en él. 
Salmos 118:24(RVR)

Este es el día en que el Señor actuó; regocijémonos y alegrémonos en él.
Salmos 118:24(NVI)

Este es el día en que el Señor ha actuado: ¡estemos hoy contentos y felices! Salmos 118:24 (DHH)


La felicidad ha estado siempre en tus manos,
solo toma la decisión y comienza a desarrollarla, 
¿Quieres un motivo?

Tú eres el motivo, solo mírate al espejo,
eres creación de Dios concebida por su amor.

miércoles, 14 de diciembre de 2011

¿Cuál es la voluntad de Dios para tu vida?


Muchos de nosotros deseamos hacer la voluntad de Dios, pero fracasamos porque no sabemos cuál es Su perfecta voluntad para nuestras vidas.
Los siguientes son algunos principios de la Palabra de Dios que te ayudarán para discernir cuál es la voluntad de Dios para tu vida.

 

  • ¡Dios tiene grandes planes para tu vida!
Nosotros fuimos creados por Dios, a Su imagen, con un propósito. Así como Dios separó desde el nacimiento a Isaías (Isaías 49:1), Jeremías (Jeremías 1:5) y Pablo (Gálatas 1:15) para un propósito específico, él también tiene un plan específico para tu vida.
    "'Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis." (Jeremías 29:11)
    La Biblia dice que la voluntad de Dios es "buena, agradable y perfecta." (Romanos 12:2) 
  • La voluntad de Dios, antes que nada, es que nosotros tengamos una relación con Él mediante Su Hijo, Jesucristo.
    "Porque esto es bueno y agradable delante de Dios nuestro Salvador, el cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad." (1 Timoteo 2:3-4)  
  • Dios quiere que seamos discípulos de Cristo.
Esto significa que todos los Cristianos debemos comprometernos a seguir la voluntad de Dios a diario, cualquiera que sea el costo.

    "Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome arriba su cruz cada día y sígame." (Lucas 9:23) 
  • La Biblia nos ayudará a conocer la voluntad de Dios.
"Lámpara es a mis pies tu Palabra y lumbrera a mi camino."  (Salmos 119:105)
  • Dios promete darnos sabiduría si simplemente le pedimos oración, creyendo que Él lo hará.
A veces sólo necesitamos pedir a Dios que nos de sabiduría para discernir su voluntad.

"Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada." (Santiago 1:5).
    En Filipenses 4:6, Dios nos dice que podemos orar por todo
  • Dios nos ha dado el Espíritu Santo para que nos guíe.
  • "Pero cuando venga el Espíritu de Verdad, él os guiará a toda la verdad." (Juan 16:13a)
  • Debemos escuchar al consejo de mujeres y hombres santos que Dios ha puesto en nuestras vidas.
Muchas veces el consejo de un padre, pastor, ministro de jóvenes, profesor de Escuela Dominical u otra persona madura es justo lo que necesitamos oír para decidir qué es lo que Dios quiere que hagamos.
    "El camino del necio es derecho en su opinión; mas el que obedece al consejo es sabio." (Proverbios 12:15)
    "Los pensamientos son frustrados donde no hay consejo; mas en la multitud de consejeros se afirman." (Proverbios 15:22) 
  • La Biblia dice que hay una paz que viene cuando agradamos a Dios con nuestras vidas.
Cuando decides entre dos alternativas por las que has estado orando, a veces una de las opciones te dará más paz. Esa opción es probablemente la voluntad de Dios.
    "Y el efecto de la justicia será paz; y la labor de la justicia, reposos y seguridad para siempre." (Isaías 32:17) 
  • Debemos confiar en Dios en fe que Él hará su voluntad en nuestras vidas.
"Fíate de Jehová de todo tu corazón, y no te apoyes sobre tu propia prudencia; reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus veredas." (Proverbios 3:5-6)
    "estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo. " (Filipenses 1:6) 
  • Dios nos ha dado dones y capacidades para usarlas en su servicio.
Dios siempre nos equipa para hacer lo que él nos llama a hacer. Si no eres talentoso en cierta área, probablemente Dios note  ha llamado a ministrar en esa área.

(ver Romanos 12:6-8, 1 Corintios12:1-11 y Efesios 4:11-13 para listas de dones espirituales y una discusión de ellos).
Recuerda:
el propósito definitivo de Dios para todos nosotros es que Él sea glorificado
(1 Corintios 10:31) y que el evangelio y el reino de Dios se expanda (Génesis 50:20 y Filipenses 1:12).

martes, 13 de diciembre de 2011

No TE falles

 
Hace un par de días atrás, revisaba facebook para ver si tenía alguna novedad y me encontré con la siguiente cita en el estado de uno de mis cyber amigos:
“Pregúntale al niño que fuiste, si te has convertido
en el adulto que siempre quisiste ser”.

Cuando lo leí, recordé inmediatamente un ejercicio que siempre me he invitado a hacer.
Todos tenemos fotos de cuando éramos pequeños, ¿verdad?
Lo más probable es que esas mismas fotos las hayamos escondido cuando llevábamos a nuestras citas a la casa, por temor a que nuestra madre o padre sacara el aterrador álbum de fotos. Bueno, ahora esas fotos pueden tener una utilidad muy práctica.

Cuando somos niños somos maravillosamente ingenuos.
Cuando somos adolescentes nos creemos invencibles y cuando nos vamos convirtiendo en adultos, ambas cosas se van perdiendo para hacerse cargo de “las cosas de grande” que llegan a nuestra vida. El mundo nos envuelve, mata nuestros sueños y los suple por sueños que son del mundo, no de Dios.
Pero hay sueños que no deberían irse con nuestra niñez o adolescencia; hay sueños que deberían durar POR SIEMPRE.

Cada uno de nosotros soñó con ser, hacer o tener algo en su vida. Cada vez que cumplíamos años sentíamos que estábamos más cerca y cuando empezaron a añadirse velas en nuestro pastel de cumpleaños y veíamos que estábamos en el mismo lugar, ese sueño parecía más lejano, llegando incluso, a ser extraño para nosotros. Yo, por dar un ejemplo; soñé siempre con honrar y cuidar a mis padres en su vejez. Comprarles una casa, cubrir sus necesidades, amarlos y respetarlos. El sueño de la casa se disipó con los años, y la distancia me hace imposible cumplir mi sueño de cuidarlos y mimarlos. Y no quiero aceptarlo pero la verdad es que...
...nos cansamos.
Nos cansamos de perseguir nuestros sueños y lo justificamos con que fueron sueños infantiles, inmaduros y producto de las utopías que tejemos en la adolescencia. Ya no hay pasión por vivir. Ya no hay novedad. Ya no hay metas.
Cuando esta situación ocurra, toma una de tus fotos de niño.
Mírate, reconócete y conéctate con los sueños y planes que tenías a esa edad; tal vez muchos de ellos eran tener algún juguete o comer una determinada cosa, pero vé más allá, conéctate con el sentimiento de desear algo con toda la fuerza de tu ser y de sentir que nada era imposible, que con solo quererlo ya lo ibas a obtener.
No le falles a ese niño que soñó con tantas cosas, a ese niño con hambre de soñar, de aprender, de vivir…No te falles a ti mismo negándote la oportunidad de sorprenderte de ti mismo por las cosas que eres capaz de hacer.

Es cierto, la lógica indica que las cosas hay que verlas para creerlas, pero recuerda esto:
La mayoría de nuestros sueños, son sueños de Dios para nuestras vidas. El te ha elejido desde el vientre de tu madre y ha diseñado cada detalle de nuestro ser, de nuestra personalidad, y obviamente de lo que debemos soñar para llegar a ser lo que El necesita que seamos para Su gloria. El mundo nos ha envuelto con su lógica de ver para creer, pero la lógica de Dios es locura para el mundo, El necesita que primero CREAS para poder VER tus sueños cumplirse.

Yo no quiero renunciar a mis sueños.
¿Y tú?

Lleva siempre una foto tuya de cuando eras pequeño,  para que cuando estés lejos de ese soñador que eres, vuelvas a conectarte y a encontrarte cara a cara con las únicas personas a las que no les tienes que fallar nunca: 

A ti mismo y a Jesús.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Dale la espalda al pasado



“De modo que si alguno está en Cristo nueva criatura es;
las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.”
(2 Corintios 5:17)

Cuantas veces nos encontramos queriendo superar algo
que nos hace daño y no podemos,
tal vez algo malo que hicimos
o por el contrario algo malo que nos hicieron.

Dicen que recordar es volver a vivir,
pero que pasa si estamos recordando lo malo,
¿estamos viviendo otra vez lo malo?
Si recordamos el dolor que alguien nos provocó,
¿Estamos sintiendo de nuevo el dolor?,
 o si estamos recordando lo malo que hemos hecho,
¿Estamos viviendo con cosas que ya nos han sido perdonadas?

La mayoría de las veces nos acordamos más de los malos momentos
que de los buenos y comenzamos a cargar con cosas del pasado,
me he sorprendido al escuchar personas que no superan etapas de su pasado,
y ahora no son felices, situaciones complicadas que ya pasaron,
pero al recordarlas a cada momento permiten que les sigan causando daño.

Cuando Dios nos dice que seremos nuevas criaturas,
no es que morirás y volverás a nacer como un bebe,
sino que tu espíritu y tu alma serán renovadas
porque si cometiste errores te son perdonados,
no importa cuántos fueron, ni por qué lo hiciste,
pero lo hace para que camines con la frente en alto,
no para que te sigas culpando;
de igual forma así como nos perdona y nos da una nueva vida,
nosotros podemos perdonar a quien nos ha hecho daño
y darnos a nosotros mismos una nueva vida,
sin resentimientos ni tristezas
al pensar en cada cosa que nos hicieron.

Los errores nos ayudan a crecer y a aprender
pero solo se utilizan y se desechan,
 no se carga con ellos por la vida,
¿te imaginas cuanto estaríamos cargando
por cada error que cometemos,
si no lo dejamos atrás?
así también las cosas dolorosas
que en algún momento nos toca enfrentar,
nos hacen madurar y crecer como personas
pero cumpliendo con ese objetivo se olvidan
para que no sigan causando daño.

No caigas en el error de seguir viviendo en un pasado
que Dios borra cuando te acercas a Él,
sea el caso de errores tuyos o de los demás hacia ti.
¿Cuánto espacio queda para el presente en una vida llena de pasado?
¿Cuánto espacio dejamos para la felicidad
si llevamos guardando el dolor de cosas pasadas?

Es tiempo de olvidar el pasado y vivir caminando hacia adelante,
cada día es una nueva oportunidad de hacerlo,
olvidar lo malo y hacer lo bueno,
perdonar y deshacernos de lo que no nos hace falta,
pedir perdón y enmendar nuestros errores
en lugar de seguirnos culpando,
¡Qué bendición, Dios nos da una nueva vida
si nos acercamos a Él de corazón!

Nunca es tarde para empezar de nuevo,
camina hacia adelante,
y dale la espalda al pasado.

viernes, 2 de diciembre de 2011

¿UNA MULETA?




Lectura: 2 Corintios 4:8-15.


"… estamos atribulados en todo, mas no angustiados…"
2 Corintios 4:8


¿Alguna vez escuchaste decir a los escépticos que la fe cristiana es sólo una muleta;
que la única razón de que algunos declaran confiar en Jesús es porque son débiles
y tienen que inventar una «religión» para poder sobrevivir?


Al parecer, esos escépticos no han oído acerca del médico que,
en un país del Lejano Oriente, pasó dos años y medio en la cárcel
siendo «reeducado», porque profesó creer en Cristo.

Más tarde, después de ser liberado, lo volvieron a arrestar;
en esa ocasión, por sus actividades en la iglesia.


Y tal vez dichos escépticos tampoco han oído sobre Pablo, e
l cual, después de confiar en Jesús, fue arrestado y azotado,
soportó burlas y padeció un naufragio (2 Corintios 11:16-29).


Estos creyentes no buscaban una muleta,
sino que tenían algo esencial y profundo en sus corazones:
experimentaban una relación personal con Dios,
producto de su fe en la obra de Jesús en la cruz.

Como resultado, se convirtieron en hijos del Rey,
deseosos de sacrificar todo por el privilegio de proclamar Su nombre.

No andaban a los saltos buscando algo que los mantuviera en pie.

¿Una muleta? Ni pensarlo.
La fe en Cristo no es una cuestión de seguridad ni de prevención,
sino de creer en Jesús y confiar en Él sin importar lo que traiga aparejado.
Significa tomar una cruz todos los días (Lucas 9:23) y vivir para el Salvador.



Reflexión:
Como Jesús soportó la cruz 
en nuestro lugar,
 nosotros voluntariamente 
la tomamos por Él.